Millones de personas en todo el mundo creen que no estamos solos en el universo y una de estas personas es William Sachiti, quien compró, vivió y trabajó en una estación de radar de defensa aérea abandonada de la RAF (Royal Air Force) durante unos tres meses.
Sachiti es un empresario de inteligencia artificial cuya empresa Kar-go usa autos sin conductor para entregar paquetes en Gran Bretaña y, según sus palabras, compró la antigua base de la RAF porque necesitaba terrenos para pruebas y desarrollo, y allí había almacenes, carreteras y refugios subterráneos.
Pero la compra vino con más que solo el espacio que necesitaba. Una torre contenía una gigantesca unidad de radar AMES Tipo 84, de 18 metros de ancho y 7 metros de alto.
La unidad de radar AMES Tipo 84 es una reliquia de la época de la Guerra Fría, que utilizaba microondas con un alcance de 400 km para detectar la radiación ionizante. Hubo cinco unidades de este modelo que operaron desde 1962 hasta 1994 y formaron parte del sistema de alerta temprana de detección de armas nucleares del ejército británico.
Escribió en una publicación en Internet, junto con una imagen para ilustrar el radar, que tiene la intención de poner el radar en funcionamiento.
«¡Ayuda! Quiero devolverle la vida a esto», decía la publicación de Sachiti.
Sachiti dijo que recibió muchas respuestas, algunas ridículas, pero no faltaron ideas para darle un uso útil y divertido a esta pieza de tecnología, incluidas algunas personas que quieren usar el radar para sondear la Luna y otras que quieren capturar OVNIs que están pasando por la Tierra.
“Me convencí de que tratar de encontrar ovnis puede ser divertido”, dice el empresario.
Cuando se le preguntó qué pensaba sobre la existencia de OVNIs y extraterrestres, el empresario dijo que es posible que los extraterrestres ya estén entre nosotros, pero que están mucho más avanzados que los humanos.
